La belleza natural de Alaska

Probablemente, muchos de nosotros, habiéndose acostumbrado a la vida en latitudes confortables y cálidas, con recelo miran la posibilidad de viajar a una región tan severa, como Alaska. Pero después de haber recorrido un largo camino entre las ciudades más grandes de este estado y conocer la increíble naturaleza de estos lugares, puedo decir con confianza que tales temores son infundados. Y no es importante ir allí en invierno o en verano, porque si se está bien equipado y preparado, se puede disfrutar de un viaje a esta región única sin ningún problema, porque la temperatura en plena temporada de invierno aquí oscila entre -12 y -5 grados centígrados. Nuestra ruta ha comenzado en la capital del estado, Anchorage. Primero fuimos al Parque Estatal de Chugach, y luego dejamos la ciudad y nos dirigimos a Fairbanks, de camino al Parque Estatal de Denali. En nuestro camino vimos los más bellos paisajes de montañas, campos, bosques y ríos. La flora de Alaska es muy diversa, por lo que una vez que llegue aquí en verano, podrá ver la floración de varias plantas. Además, la región es muy popular entre los aficionados al ocio activo y a la pesca, por lo que al salir a la carretera, vale la pena pensar de antemano qué equipo llevar.