El tercer día, vamos a Ingolstadt, la sede de Audi. Si no tienes tiempo para desayunar en el hotel, puedes comer en el restaurante del museo.

Todo el mundo sabe que los principales rivales de Audi en el mercado son Mercedes-Benz y BMW, los llamados "Tres Grandes de Alemania".
Muchos piensan que la guerra de carteles publicitarios comenzó con BMW en 2006, cuando ésta felicitó a Audi por la victoria en el concurso "Coche del año 2006" en Sudáfrica. Pero no, todo empezó en los lejanos años 80, cuando Audi publicó un vídeo promocional en el que el Audi 200 daba vueltas al Mercedes-Benz E-Klasse y al BMW Serie 5.
Al cabo de un año, BMW publicó un vídeo de respuesta, en el que mostraba su nuevo modelo de la serie 5 de BMW. En el vídeo promocional de BMW estaban presentes tres coches, todos ellos cubiertos con tres lonas. El primer coche que se mostraba era el BMW Serie 5, mientras que los dos restantes desaparecían y la tela que los cubría caía al suelo. Fue una pista para Audi y Mercedes-Benz. Mercedes-Benz decidió ignorar las campañas publicitarias de Audi y BMW al no responder nada a la actualidad.
La idea principal del Museo Audi es el movimiento. Casi ninguna de las piezas expuestas es estática. Aquí se pueden encontrar automóviles desde los tiempos de la fundación de la marca en 1909 hasta la actualidad. Todo ello en un edificio de gran categoría, por el que se puede (y debe) pasear durante horas.

Para el almuerzo, diríjase a este restaurante alemán - Gasthaus Bonschab.

Excelente parque para pasear por la tarde y antes de cenar.

La cena de hoy ofrece auténticas hamburguesas alemanas en el Brezl's.

Pase la noche en el Hotel Ammerland, situado fuera del centro de la ciudad.