Sirmione

Este castillo del siglo XIII es un símbolo reconocible de Sirmione. Por tanto, lo primero que hay que hacer hoy es echar un buen vistazo y fijarse en todos los detalles. Hay un museo en el castillo. Al final del recorrido, asegúrese de subir a la torre más alta y apreciar las vistas desde allí.

Una vez que haya terminado con el castillo, diríjase al otro lado de la ciudad para ver otro famoso punto de referencia local: las pintorescas ruinas de una antigua villa romana que data de hace unos dos mil años.

Parada para comer en una pizzería cercana. Puede que sea un poco pronto, pero si va a visitar el complejo termal hoy, recuerde que es aconsejable hacerlo 1,5-2 horas después de comer.

Después de comer, diríjase a la punta del promontorio, donde encontrará la bellísima y salvaje playa de Jamaica, que es una losa de roca pulida por las olas que desciende suavemente hacia el agua esmeralda.
Para llegar allí hay que recorrer un camino por la orilla y un poco por el agua, quitándose los zapatos. Pero el esfuerzo merece la pena. Aquí no hay que nadar, sólo hay que sentarse en la orilla y admirar la superficie del lago y las montañas que hay detrás.

Sirmione es famosa por sus aguas termales. El complejo Aquaria Thermal Spa es un gran parque con piscinas al aire libre y cubiertas con agua termal y regular, donde también puede disfrutar de una variedad de tratamientos de bienestar. Aquí podrá relajarse durante todo el año, todos los días desde la mañana hasta la noche.
Todos los detalles necesarios aquí.

Termine el día en un buen restaurante italiano, como Faggio Rosso, o en algún otro lugar cercano a su hotel.